El color es el elemento imprescindible para la composición artística. Todo artista en su capacidad de expresar lo que siente, parte de la realidad, como es la forma, el color y el sonido.
El color, no se considera sólo una gama de colores, si no que los colores son capaces de transmitirnos sensaciones agradables y desagradables, por ejemplo, el color azul, nos expresa calma, serenidad, mientras que el rojo (según el contexto) nos resulta excitante, cálido e incluso nos puede resultar violento en algunas ocasiones.
El objetivo del artista es mostrar sus sentimientos a través de la pintura, del color, de la forma e intentar traspasar el interior del receptor para que éste entienda el mensaje.
El color y la forma están especialmente ligados, la existencia de ambas es infinita, al igual que las combinaciones y los efectos que se pueden realizar.
“El color es más para ser sentido, que pensado”
Una obra de verdad debe nacer desde dentro, desde el alma de quien las crea, del artista, y elegir la forma y los medios para llevar a cabo su arte.
Hace para terminar este apartado, una comparación entre el verdadero artista y el que no lo es, siendo las responsabilidades de este primero las de plasmar su talento, sus sentimientos en todos sus aspectos como hombre, y como ser contribuyente a la atmósfera espiritual.
Por otro lado, el punto 4.1 versa sobre la línea, que es la primera consecuencia natural del punto, y los elementos que intervienen en la realización de éstas, diferenciándolas en verticales, horizontales, diagonales y rectas libres.
Las líneas tienen lugar a través de fuerzas, que pueden dar lugar a las curvas. También las asocia con las temperaturas (frio, cálido, frio-cálido), los colores pictóricos (negro, blanco, rojo, amarillo o azul), y sonidos. Para el autor, los tres elementos pictóricos son la línea, el plano y el color.
Del mismo modo, nos encontramos con los ángulos que forman las líneas, agudo, recto, obtuso y libre; y el concepto de plano (se entiende la superficie material llamada a recibir el contenido de la obra), debiendo éstos su origen a la curva y sin perder jamás cierto parentesco con el círculo.
Se dice por consiguiente, que tenemos según su grado de popularidad la xilografía que es el plano, el aguafuerte que es el punto y la línea, y por último, la litografía, punto, línea y plano.
A modo resumen podemos decir que “las leyes de composición de la naturaleza se ofrecen al artista no para ser imitadas sino para ser confrontadas con las del arte”
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